Una copa de vino o una cerveza de vez en cuando no tiene porqué afectar negativamente al cumplimineto de los objetivos que te has marcado. Pero beber alcohol regularmente mientras intentas ponerte en forma puede sí resulta perjudicial para los objetivos de tu entrenamiento. Sí, lo sabemos, es un sacrificio más que hay que hacer, pero no hay alternativa si de verdad quieres ponerte en forma :-).
El alcohol puede contrarrestar los resultados del entrenamiento de muchas formas, más de las que puedas imaginar.
Para empezar, estimula tu apetito, por lo que no es extraño que acabes comiendo unas patatas fritas o varias porciones de pizza antes de irte a la cama. Además, tu cuerpo no registra las calorías líquidas de la bebida, por lo que no te pide comer menos para compensarlo. Las bebidas alcohólicas son una fuente de "calorías vacías" porque contienen poco o nada de vitaminas y minerales valiosos. Finalmente, si bebes alcohol mientras comes, puedes reducir la capacidad de tu organismo para digerir, absorber y almacenar los valiosos nutrientes de los alimentos.
Si aún así no te hemos convencido y sigues dispuesto a combinar alcohol y deporte, mejor sigue los siguientes consejos.
Alcohol y fitness: Qué hacer y qué no hacer
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No bebas nunca más de dos copas. La mejor manera de disfrutar el alcohol es hacerlo con moderación.
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Evita las bebidas mezcladas. Los combinados tipo ron con Coca Cola o cualquier otro destilado con refresco generalmente tienen más calorías y azúcares y además se suelen servir en grandes cantidades. Pero ten cuidado también con los cócteles dulces: Por ejemplo, una piña colada contiene 490 calorías ¡lo mismo que una comida completa!.
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Beber mucha agua. El alcohol puede causar deshidratación. Si deseas compensar esta pérdida, bebe agua ya que diluye la concentración de alcohol en la sangre. Para esto funciona bien tomar un vaso de agua antes y después de cada copa.
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Beber despacio y conscientemente. Recuerda que tú estás allí para disfrutar de una deliciosa copa en buena compañía, no para emborracharte lo más rápido posible.
Siguiendo estos consejos puedes combinar de forma responsable alcohol y gimnasio. Si todo va bien, estarás en forma al despertarte y con suficiente energía para comenzar tu sesión de entrenamiento. La clave para combinar alcohol y el deporte es disfrutar mucho pero beber con moderación :-)